La igualdad es un derecho fundamental que tenemos todas las personas. Ello está ampliamente reconocido por las instituciones internacionales, Así como, en nuestro ámbito nacional, la Constitución Española, en sus artículos 1, 9.2 y 14.
Cuando hablamos de igualdad, no nos referimos solamente a la igualdad de género, sino que, también nos referimos a la igualdad de acceso al empleo por la condición física o psíquica.
En cuanto a ello, la integración de personas con discapacidad en el ámbito laboral, ayuda a las empresas a impulsar la Responsabilidad Social Corporativa de la organización.
Ello lo podemos observar en que en las grandes empresas hay un cupo reservado para personas con discapacidad (2% en empresas de 50 o más trabajadores).
En cuanto a las pequeñas empresas no se dice nada del porcentaje o números de acceso a personas con discapacidad. En este caso, sería interesante que dichas organizaciones fomentaran un plan para el acceso y adaptabilidad de personas con discapacidad, ello, ayudarán a la organización a potenciar la RSC.
El acceso laboral a personas con discapacidad les da cierta autonomía y seguridad en varios aspectos. Para que puedan acceder e integrarse al empleo en las empresas, éstas, deberán aportar las mismas condiciones de acceso pero con cierta adaptabilidad. Con ello, hay que decir que, no solo hay que tener ciertas nociones de adaptabilidad hacia las personas con discapacidad que van a obtener un puesto de trabajo, sino que, también, hay que concienciar al resto de empleados. Se debe tener cierta empatía, evitar toda clase de perjuicios, la organización ha de tener una cierta adaptabilidad para el fácil acceso a las instalaciones así como, aportar la formación necesaria para que puedan desarrollar las funciones del puesto de trabajo de forma adecuada.
Estos planes de fomentar el acceso al empleo a personas con discapacidad ayuda a potenciar, como se ha mencionado anteriormente, la RSC de la organización, así como la imagen de la propia empresa.
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